Las infraestructuras lineales (ferrocarriles y carreteras) dividen el territorio fragmentando los hábitats naturales y creando grandes barreras que impiden el desplazamiento de la fauna. Si bien al construir una carretera el área afectada de modo directo puede parecer relativamente pequeña, estas se extienden por miles de kilómetros, convirtiéndose en una gran brecha. La fragmentación es una alteración de un lugar natural que implica la generación de discontinuidades en los hábitats; transformando una superficie continúa, en una serie de fragmentos que ahora están desconectados y aislados entre sí.
Estas barreras impiden la movilidad de los organismos o de sus estructuras reproductivas, lo que limita el potencial de estos para su dispersión y colonización. Estas subpoblaciones van fluctuando más ampliamente en el tiempo, generando una mayor probabilidad de extinción en comparación con las grandes poblaciones. Muchas especies de insectos, mamíferos y aves no cruzan estas barreras, por lo que las plantas que tienen frutos carnosos o semillas que son dispersadas por animales son también afectadas. Debido a esto diversos animales que consumen recursos que se encuentran dispersos, no pueden moverse libremente a través del territorio y las especies que dependen de este proceso se ven limitadas en su alimentación, ya que no pueden recorrer a los hábitats vecinos.
Además de ser una barrera, la carretera se convierte en un borde que genera cambios en las condiciones bióticas y abióticas, debido a que en las inmediaciones de la vía se generan condiciones con mayor temperatura, mayor radiación, menor humedad, y mayor susceptibilidad al viento. Como consecuencia se modifica la distribución y abundancia de las especies, cambiando la estructura de la vegetación y por lo tanto, la oferta de alimento para la fauna. Estos cambios afectan mayormente todo las especies del interior del ecosistema que ha sido fragmentado, debido a que pueden ser desplazadas por las especies de espacios abiertos, que encuentran en el nuevo hábitat condiciones más favorables para su reproducción y supervivencia.
Si bien no hay registros oficiales a nivel mundial, se estima que tan sólo en Estados Unidos aproximadamente 1 millón de animales son atropellados diariamente al intentar cruzar las carreteras. El atropellamiento de fauna es el impacto más notorio de la fragmentación de los ecosistemas, al quedar tendidos sobre los costados las vías, luego de ser atropellados por autos que transitan a gran velocidad y que no alcanzan a esquivarlos, causando graves accidentes que afectan no solo a los animales sino también a los conductores.
Anteriormente las medidas implementadas consistían en impedir el acceso de los animales a la calzada o las vías por medio de vallas, lo que empeoraba en múltiples casos los procesos de fragmentación. En la búsqueda por proteger la fauna y evitar la fragmentación de lo ecosistemas, surgen los denominados pasos de fauna. Estas estructuras permiten a los animales cruzar las barreras impuestas por el ser humano, favoreciendo la conectividad ecológica. De esta forma se ayuda a la fauna a tener un punto de conexión entre dos áreas, a las que de otra forma no podría acceder de forma segura.
Los pasos de fauna permiten conectar zonas separadas por la actividad humana, lo que promueve a que distintas poblaciones puedan intercambiar individuos y relacionarse, además de buscar recursos y recuperar la amplitud de sus territorios.
Los primeros pasos para la fauna fueron construidos en Francia durante los años 50 y desde entonces, varios países como Japón, Holanda, Canadá, Alemania y Australia, han creado diversas estructuras para reducir el conflicto entre la vida silvestre y las carreteras.
Son múltiples las opciones de tipos de pasos de fauna, como pero dependiendo del tipo de especies o condiciones del lugar se deben implementar la más adecuadas. Algunas de las estructuras más comunes son: Ecoductos:, pasos superiores específicos para fauna, pasos superiores multifuncionales, pasos inferiores específicos para grandes mamíferos, pasos inferiores multifuncionales, pasos inferiores específico para pequeños vertebrados, drenajes adaptados para animales terrestres, drenajes adaptado para peces y pasos para anfibios.
En carreteras
Una de las soluciones mas efectivas para esos pasos de fauna son los túneles, viaductos y puentes. Los animales de tamaño grande y mediano así como los rebaños pueden pasar por viaductos y túneles específicos sin problemas. Idealmente son grandes y anchos, para mantener presente la vegetación de la zona.
Soluciones especificas
Para otro tipo de animales se han desarrollado soluciones a medida como túneles y drenajes para peces y anfibios así como en los países con grandes zonas boscosas han llegado a instalarse enormes redes para que crucen ardillas, monos y otros animales arbóreos.
Algunas son monumentales y otras minúsculas pero todas tienen como objetivo la conectividad ecológica. A continuación te compartimos algunos de los ejemplos más destacados que han sido implementados alrededor del mundo:
Ecoducto canadiense
El Ecoducto de localizado en Alberta, Canadá surgió debido a la preocupación de un grupo de científicos debido a que esta carretera, que atraviesa el Parque Nacional de Banff, podría bloquear el paso a los animales impidiéndoles la procreación con otros de su misma especie, lo que podía conducir al aislamiento y a la endogamia.
Túnel para pingüinos
En Oamaru, Nueva Zelanda han implementado un túnel para que los pingüinos Kororas o azules, los cuales son la especie más pequeñas del mundo, puedan cruzar una transitada carretera para llegar desde el mar hasta sus nidos y alimentar a sus crías.
Puente salvaje
La autopista A50 atraviesa casi por completo los Países Bajos y su flujo vehicular es intenso y veloz, convirtiéndose en un grave problema para los animales que al cruzar, eran muchas veces atropellados. Este cruce permite a la fauna local pasar de un lado a otro de la carretera de manera segura sin interrumpir el tránsito de los vehículos y previniendo accidentes.
Túnel para elefantes
En Kenia, construyeron un paso subterráneo para que los elefantes pudieran pasar por debajo de una carretera sin riesgo. Este tipo de túneles permite a la fauna cruzar de un lado a otro de la carretera de manera segura sin interrumpir el tránsito de los vehículos y previniendo accidentes.
Túnel para tortugas
La Compañía de Ferrocarriles del Oeste de Japón ha implementado cinco túneles para evitar que las tortugas que viven en los alrededores sean atropelladas dañadas en las vías. Las zanjas son comprobadas mensualmente, y las tortugas atrapadas en las estructuras son llevas a un acuario donde se ocupan de su recuperación para posteriormente ser puestas otra vez en libertad.
Puente para Cangrejos
Anualmente en la isla de Navidad, un pequeño territorio australiano localizado a 370 kilómetros de la costa de Indonesia, se produce la migración de los cangrejos rojos que viajan desde sus áreas de desove, ubicadas tierra adentro, hasta el océano. Los cangrejos migran en números tan alto que los caminos se vuelven intransitables, lo que motivo la construcción de uno de los puentes más extraños y concurridos del mundo, único en su estilo.
Cruce para anfibios en California
En muchos casos los drenajes o pasos inferiores por los que corren pequeños arroyos constituyen una óptima estructura, para el paso de anfibios como en este ejemplo de California.
Ecoducto alemán
La carretera B38 en Alemania es atravesada por un Ecoducto que permite el cruce de gran cantidad de animales salvajes sin ningún peligro. En Este país hay varios puentes similares que buscan proteger los animales silvestres y la conservación de la biodiversidad.
Puente de cuerdas
En Australia existe un puente de cuerdas que atraviesa la carretera de Hume en Victoria, el cual permite que las ardillas voladoras se desplacen de un lado a otro de la carretera, puesto que su diversidad genética y por tanto la supervivencia de la especie estaba en peligro, debido a la pérdida y fragmentación de su hábitat.
Si bien la implementación de este tipo de infraestructuras puede implicar altos, sus beneficios son sin duda mucho mayores, ya que además de preservar la vida de la fauna y generar conectividad ecológica, evitan muertes de conductores en accidentes. Gracias a este tipo de estructuras se han salvado muchas vidas animales y humanas, por lo que debe tomarse en serio su implementación y compromiso con el medio ambiente, antes de proyectar una nueva carretera o de mejorar las existentes.
Texto: Jaime Hernandez